Tómalo o déjalo
- enfocadosadolescen
- 24 abr 2020
- 2 Min. de lectura
“Cada uno es responsable ante Dios de su propia conducta” Gálatas 6:5
Si nos seguís y leíste las reflexiones anteriores, ya sabes qué es la responsabilidad (y si no, te invito a que las leas).
Como bien dice Gálatas 6:5, cada uno va a tener que rendir cuenta ante Dios de lo que hace, por eso, es importante que sea responsable al tomar decisiones, debo decidir hacer las cosas bien, hablar bien, pensar bien y formar buenos hábitos, pero a nosotros, los adolescentes, nos resulta bastante difícil esto, por eso, te dejo algunos aspectos importantes para cultivar buenos hábitos:
· REPETICIÓN: cada vez que se presente la oportunidad lleva a la practica la actitud que quieras desarrollar.
· FRECUENCIA: crea las condiciones necesarias para poner en práctica los buenos hábitos, no esperes a que ocurran espontáneamente.
· CONSTANCIA: mantén el ritmo, no dejes que el desánimo de venza, no te rindas.
· PERFECCIONAMIENTO: no te conformes con llegar a niveles aceptables, siempre aspira, trabaja y esfuérzate en llegar a niveles más altos; cuando lo logres, se humilde.
Pero ¿Para qué tengo que formar buenos hábitos o cambiar los que ya tengo si me siento cómodo/a con lo que hago? ¿Qué relación tiene esto con la responsabilidad?
Si quiero lograr grandes cosas en mi vida, tengo que empezar por cambiar cosas pequeñas, por ejemplo: levantarme temprano por más de no tener una necesidad para hacerlo, ordenar mi cama todas las mañanas, entre otras; si cumplo con pequeñas responsabilidades diarias, más adelante podré asumir responsabilidades más grandes, en cambio, si no puedo ni siquiera levantarme temprano, menos voy a poder tener un trabajo estable en el futuro. Pero, si trato de hacerlo sola, el éxito no me va a durar mucho, en cambio, si le pido ayuda a Dios, Él como me ama tanto lo hará sin dudarlo.
Jesús no solo quiere ayudarme a cambiar cosas pequeñas, Él quiere ser mi amigo, quiere que le cuente de mis problemas y de mis logros, quiere entablar una relación conmigo, y para eso tengo que asumir la responsabilidad o incrementar el hábito de hablar con Él y leer Su palabra todos los días.
Te animo a que lo hagas; cuanto más lo conoces, más increíble te parece.
Ora conmigo: Jesús, gracias por cuidarme, protegerme y estar conmigo siempre, te pido que me ayudes a cambiar los malos hábitos en mi vida, pues estos son la puerta al fracaso, quiero que me ayudes a incrementar los buenos, porque estos son la clave del éxito; te pido que me des de tu sabiduría para tomar buenas decisiones, y humildad para cuando llegue a mi victoria, amén.
Escrito por un adolescente

Comments