top of page
Buscar

¿CONFÍAS EN MÍ?

  • Foto del escritor: enfocadosadolescen
    enfocadosadolescen
  • 21 abr 2021
  • 2 Min. de lectura

Imaginate un camino lleno de diferentes obstáculos, que se vuelven cada vez más difíciles porque debes atravesarlo con los ojos vendados, sin ver nada. Hay una voz fuerte y clara que con mucho amor los guía hacia la meta, cuidando y guiando cada paso porque esa voz sí puede ver esos obstáculos presentes y futuros. Sin embargo, hay otras voces que quieren hacerte errar el camino perdiendo su rumbo; está en vos la decisión de qué voz escuchar, la que le guía a la meta, u otra que quiera llevarte a cualquier lado.


Algo similar pasamos todos los días en nuestra vida, no es que andamos con los ojos vendados por la calle, aunque si nos ponemos a pensar nadie conoce el futuro, ni siquiera qué va a pasar mañana, hacemos planes pero realmente no sabemos qué nos espera y vamos como a ciegas, pero el camino se hará más sencillo si tenemos a alguien al lado que nos va diciendo para donde ir y para donde no ir, ese alguien es Dios, pero ¿Estamos atentos a escuchar y seguir su guía o estamos escuchando también otras voces y nos perdemos un poco a veces? ¿Qué puntaje le pondrías a tu confianza en Dios? ¿Y cuando vienen los problemas, o estas medio perdido/a qué tanto confias en Él para salir adelante?


Esas voces que no nos quieren llevar por buenos rumbos, muchas veces nos etiquetan diciendo « ¿Qué de bueno puede salir de vos si naciste en derrotalandia?” “Si tu papá es un perdedor, vos no creas que vas a ganar algo bueno.” “Si tu hermano fue un vago en el colegio y no aprobaba nada, a vos te espera lo mismo”… Y tantas cosas más, que nos lastiman y desaniman. Pero esa no es la opinión que Dios tiene de vos, Él Señor te diseñó para avanzar y salir adelante.


Esto no quiere decir que no vas a tener problemas en la vida o no vas a tener que enfrentar dificultades porque a veces las dificultades nos hacen más fuertes y hasta pueden esconder oportunidades.

La Biblia dice que somos más que vencedores (Romanos 8:37); o sea, que podés caminar creyendo que siempre hay esperanza y que siempre habrá un amanecer después de cualquier noche.


CON JESÚS PASAMOS A SER GANADORES.

Mira este otro texto: « Pero después de que ustedes hayan sufrido por un poco de tiempo, Dios hará que todo vuelva a estar bien y que ustedes nunca dejen de confiar en él; les dará fuerzas para que no se desanimen, y hará que siempre estén seguros de lo que creen. Recuerden que Dios nos ha elegido por medio de Jesucristo, para que formemos parte de su maravilloso reino.» 1 PEDRO 5:10.

El pasar por pruebas y problemas es natural, son exámenes, que cuando los superas tendrás una mejor preparación y ayuda para los futuros.

Cuando lleguen esas voces que nos hablan de derrota, de fracasos, de pérdidas, de que así nacimos y así nos moriremos, recordemos: Sos una persona diseñada para triunfar, Dios no diseña fracasados, no diseña perdedores, no diseña mediocres.

Es tiempo de creer, hablar, actuar y pensar como todo campeón en Jesús, confiando que en Jesucristo somos más vencedores.





 
 
 

Comments


bottom of page